¿Qué tienen que ver la ortodoncia y el marketing? Pues aparentemente nada, pero realmente mucho. Las nuevas técnicas del marketing han abierto sus puertas al mundo sanitario para ayudar a sus profesionales a gestionar sus empresas, entender mejor a sus pacientes y mejorar el trato de tú a tú desde una nueva perspectiva. Sobre este universo, tan nuevo como imprescindible ya en cualquier clínica, trata el máster Executive MBA en Odontología de la Cátedra Dental Doctors, en la Universitat Politècnica de València, que dirige Primitivo Roig y que acaba de realizar la doctora Genoveva Borja.
“Han sido dos años de módulo básico y un año de MBA. Hemos estado haciendo trabajos sin parar hasta conseguir realizar una gran radiografía de protocolos de trabajo y de gestión administrativa de nuestras clínicas. En el curso de gestión dental nos enseñaron a hacer un DAFO, es decir detectar las debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades de nuestras clínicas. Con los datos analizados hemos hecho planes de trabajo para mejorar en unas áreas e incrementar en lo que destacamos”.
“De la mano de Primitivo Roig, del Centro Dental Doctors, hemos descubierto muchos aspectos de gestión de una clínica. Uno de los aspectos que más valoro, porque es la clave para mejorar, es el de cómo hacer encuestas a los pacientes. Encuestas cómodas para quien contesta y con las preguntas adecuadas para que las respuestas sean la pura verdad, sin ningún tipo de miedo o condicionante. Y con la verdad de la visión del paciente en la mano sí que se puede trabajar para mejorar y avanzar”.
“Los profesores de los que hemos aprendido han sido abogados, contables, ingenieros, economistas, empresarios etcétera que nos han dado una visión diferente. Una visión de empresa, de cómo gestionar al personal y cómo hacer reuniones de trabajo sin perder el tiempo. Me encanta aprender y los profesores han sido tan buenos que acababa el día y decía ¿ya se ha acabado? He disfrutado porque me apasionan los conocimientos nuevos, sobre todo de áreas de las que puedo aprender mucho”.
“Soy muy organizada en la clínica y eso me ha servido para tener muchos aspectos del Máster avanzadas, pero en el caso de cómo relacionarte con el paciente me han enseñado nuevos aspectos. Vengo de un mundo de odontólogos, soy la tercera generación de una clínica abierta en Gandia en 1927. He visto trabajar a mi abuelo y a mi padre en la clínica toda la vida y ellos eran los que tomaban todas las decisiones, donde lo que decidía el médico “iba a misa”, pero ahora ya no. Ahora todo ha cambiado el trato es más cercano, más personal, nos sentamos y hablamos como amigos. El paciente ya no está sentado a la otra parte de la mesa sino junto a mí. Lo primero que hago es preguntar ¿qué quiere? ¿cómo es la sonrisa que sueña o imagina? y a partir de ahí miramos el problema real y buscamos una solución”.
“En Ortodoncoa Borja hemos tenido casos claros de ortodoncia, que requieren de un tratamiento largo, pero hablando con el paciente hemos descubierto que necesita una solución rápida porque tenía una entrevista de trabajo y hemos decidido poner unas carillas y dar salida a esa angustia y luego ya realizar el tratamiento. Por eso lo que me han enseñado es a fomentar ese aspecto de sentarnos con el paciente y hablar. Uno trabaja con la mentalidad de un profesional, pero al final lo que tienes que hacer es adaptarse a la mentalidad del paciente”.
“Y ahora con todo lo mejorado en gestión de clínicas caminamos más rápido hacia el futuro de la ortodoncia que consiste en coordinar los tratamientos de ortodoncia con la cirugía facial. Cada vez tratamos más casos de deformidades faciales que necesitan un trabajo conjunto y metódico con los cirujanos maxilofaciales. En nuestro caso tenemos la gran suerte de poder trabajar, desde Gandia, mano a mano con el Icomf, Instituto de Cirugía Oral y Maxilofacial de Valencia, que dirigen los cirujanos el Dr. Alfonso Borja y Dr. Francisco Soler”.